Les pego una parte de la nota que escribió Victor Hugo Morales en La Nación de hoy:Siete, los sueños del Faraón que no es el Cholo, pero se pasea como si tal esta semana. Siete, los milagros que cuenta Juan y siete las últimas palabras que no eran gol, precisamente...El siete tan sagrado desde los babiloicos y los hebreos hasta los cristianos. Siete días para la creación y al séptimo gol, descanso. Siete veces paga la muerte de Cain, pero a quién había matado Gimnasia que en realidad se mata en dos torneos, de los cuales uno es televisión como "Bailando por un sueño". Siete, los sueños del Faraón que no es el Cholo, pero se pasea como si tal esta semana. Siete, los milagros que cuenta Juan y siete las últimas palabras que no eran gol, precisamente.
Siete pecados capitales, y siete colinas. Siete dolores, de la virgen. Y siete dones de Estudiantes. Siete maravillas en una tarde que integra a un número con mucha historia, que ahora suma otro dato, por Verón y su genio distinto, el Cholo y su presión, los goles de Pavone y Calderón que siempre están, y por Gimnasia que se aferra al programa de televisión que es la Sudamericana y se queda con siete de rating para todo lo demás. "¿Con siete ayes clavados dónde irán los cien andaluces del naranjal?"(G.Lorca).
Gracias Victor Hugo!! Si quieren leer la nota entera: http://www.lanacion.com.ar/849918
Otras notas que salieron en los principales diarios del país:
Creo que la mejor nota que salió fue una de Olé titulada "Hombre Lobo: cómo zafar de la maldición". No tiene desperdicio
ResponderBorrar16.10.2006 | Olé.com.ar | Fútbol Local
ESTUDIANTES 7 - GIMNASIA LP 0 : YO DIGO
Hombre Lobo: cómo zafar de la maldición
FEDERICO LADRON DE GUEVARA. .
La maldición del Hombre Lobo (del griego "licántropo") es el más universal de todos los mitos. Y dice que, para que alguien se convierta en ese ser velludo (e hincha de Gimnasia, claro) hace falta "beber en el mismo lugar donde lo hizo un lobo", "dormir desnudo a la luz de la luna llena" o, tal vez lo más interesante, "ser el séptimo hijo varón de una familia y no haber sido bautizado". El séptimo, sí, justo el séptimo. Como el gol que pidió —y festejó a destajo— la hinchada de Estudiantes. Es más, a principios del siglo XX, la creencia de la maldición del Hombre Lobo estaba tan extendida en la Argentina que no eran pocos los padres que, si tenían un séptimo hijo varón, lo abandonaban, lo daban en adopción o, directamente, lo asesinaban. Así, para evitar semejante despropósito, en 1920 se estableció una ley por la que el presidente de la Nación se convertía en el padrino de estas criaturas (en el caso de Gimnasia, se sabe, el vínculo con la presidencia se plantea a través de la suegra de Kirchner: la mamá de Cristina es fana del Lobo). De todos modos, lo que nos interesa dejar en claro en esta columna es, siempre según el rigor enciclopédico del mito, cómo se hace para que el Hombre Lobo se libere de su maldición. Hay varias maneras: debe ser golpeado tres veces en la nuca con un cuchillo, ser saludado con el signo de la cruz, debe derramar tres gotas de sangre o —seguramente no va a faltar el hincha de Gimnasia que intente hacerlo con tal de sacarse de encima la mufa que le quedó tras la goleada de ayer en el Estadio Unico— permanecer arrodillado en el mismo punto durante, sí, 100 años.
http://www.ole.com.ar/jsp/v4/pagina.jsp?pagId=01291174