SE FUE

Alejandro confirmó su renuncia como técnico de Estudiantes. 

En las próximas horas y días se dirá mucho sobre su decisión, también aparecerán millones de historias: se fue porque no le trajeron un 9, se desgastó la relación con los dirigentes, se peleó con Verón, se peleó con los referentes y muchísimas cosas, algunas podrán ser ciertas, y otras delirios de oportunistas y tira bombas. 

La verdad, no me importa. Se va uno de los mejores técnicos que tuvimos en toda nuestra historia, sin dudas. Un estudioso, un estratega, un tipo que trabajaba los partidos durante toda la semana, previsor, inteligente, sensato, humilde y agradecido.

Una persona y técnico en el que confiaba plenamente, que le creía cada una de las palabras que decía. Y es por eso que respeto su renuncia, me cuesta creer que haya tomado tremenda decisión sin pensar en la repercusión y consecuencias que dicha decisión iba a generar en su querido Estudiantes. 

Muchos dirán que tenía el mejor plantel, que venía de ser campeón, que lo hubiera hecho antes. Reitero, me chupa un huevo lo que se diga de ahora en más. Lo que si queda claro es que si Sabella decidió renunciar a 9 días de comenzar el torneo fue por algo demasiado pesado que no pudo soportar. Quizás seguir con esa carga hubiera sido traicionarse a si mismo, y por transición a todos los socios e hinchas.

Mi respeto, admiración y agradecimiento eterno para Alejandro Magno, no olvidaré jamás cómo gritaste aquel empate de Sanchez Prette en el minuto 51 en tu primer clásico, la impresionante Copa Libertadores, el orgullo del Mundial de Clubes y la lección que le diste a TODOS en este último campeonato conseguido.

Sabella alguna vez dijo que Verón es el jugador más preponderante de la historia de Estudiantes. Ahora se va un técnico que tuvo una preponderancia en un equipo pocas veces vista, un estudioso del fútbol, que heredó y explotó el laboratorio pincha como sus maestros Zubeldía y Bilardo.

Todos sabíamos que alguna vez se iba a ir, pero merecía otro cierre, quedará para otra oportunidad. Gracias Alejandro por llevarnos a la "gloria", te ganaste un lugar en el Olimpo de Estudiantes.